Según datos de GT Motive, más del 88% de las reparaciones que se hacen en talleres las pagan los seguros. Dado este gran volumen de facturación, muchas aseguradoras cuentan con talleres asociados.
En 2014, según datos de Audatex, el 28,6% de los ingresos de los talleres españoles procedía de las reparaciones de la carrocería. Según explica Andrés Herrera, profesor técnico de Electromecánica y Automoción, las reparaciones más importantes y más costosas que pueden tener lugar tras un siniestro son las relacionadas con los elementos estructurales del vehículo (largueros, traviesas, montantes…). Según GT Motive, el 88% de las reparaciones que se hacen en los talleres las pagan los seguros.
Además, manifiesta que “si los daños se producen en la zona central, los costes de reparación se encarecen exponencialmente ya que se trata de una zona prácticamente indeformable, debido a que es la que se encarga de proteger a los ocupantes”. Normalmente, esto suele suceder tras sufrir un gran impacto.
Por el contrario, “las zonas delantera y trasera están diseñadas para transformar la energía cinética (generada por el movimiento o la velocidad) en energía de deformación. Esto explica que este tipo de piezas sufra menos daños y su coste de reparación sea mucho más asequible”.
Sin embargo, el factor clave para determinar la gravedad de un accidente es la velocidad. “Los daños sufridos suelen ser directamente proporcionales a la rapidez con la que circula un vehículo, lo que repercute también en las zonas que se pueden dañar”.
Impactos laterales, frontales y traseros
En cuanto a la gravedad en los impactos, Andrés Herrera manifiesta que los laterales suelen ser los que más deformaciones causan en un vehículo. “Los elementos estructurales que se dañan tras un impacto de este tipo suelen ser las puertas, las aletas, los pilares, el estribo, las torretas de los amortiguadores, etc. En cuanto a las piezas mecánicas que pueden quedar dañadas son los puentes, las ruedas, manguetas, palieres…”.
Los impactos laterales son los que más deformaciones causan en un vehículo
Por otro lado, “los accidentes frontales causan daños estructurales en paragolpes, traviesa, frente, aletas, pasa ruedas y largueros principales y superiores; y mecánicos en radiadores, ventiladores, manguitos, etc.”
“En cuanto a los impactos traseros, las piezas que se dañan son el paragolpes, traviesa, aletas, pasa ruedas, piso del maletero, portón trasero y largueros traseros. Además, dependiendo de la intensidad del impacto se pueden perder algunos de los componentes del puente trasero del vehículo”.
Qué coches son más caros de reparar
En cuanto al tipo de vehículo, Andrés Herrera explica que “si los daños producidos afectan a los elementos mecánicos, el coste de reparación será mayor en un vehículo híbrido que en uno de gasolina o diesel, debido, sobre todo, al encarecimiento de las piezas. De la misma forma, también será más caro reparar un vehículo de gama alta, que uno estándar. Sin embargo, al hablar de elementos estructurales, el precio de reparación sólo será diferente si varía el modelo del coche”.
¿Cuáles son las averías más caras de un coche?
Además de los daños ocasionados por un siniestro, el coche puede requerir reparaciones por otros motivos. Descuidar el mantenimiento del vehículo, darle un mal uso, o incluso utilizar un combustible de baja calidad pueden averiar los elementos mecánicos del vehículo y repararlos suele ser bastante costoso.
El turbo
Entre los elementos más caros de reparar se encuentra el turbo. El precio de uno nuevo ronda entre los 1.000 y los 5.000 euros, dependiendo del vehículo. Además de esto, hay que añadir la mano de obra, que suelen ser unas 8 ó 9 horas. Esta avería se suele producir por circular con el motor muy revolucionado, con exceso de temperatura, falta de engrase o impurezas en el aceite, entre otras.
Los inyectores
Otros de los componentes qué más dinero cuestan son los inyectores, especialmente los diesel porque son más caros. Normalmente suelen estropearse por el uso, pero también puede ser debido a la mala calidad del combustible. Sustituirlos cuesta alrededor de 2.000 euros y unas 30 horas de mano de obra.
Bomba de combustible
La bomba de combustible es una pieza muy delicada. Suele romperse debido al consumo de gasolina de mala calidad, que contenga agua o metal. Si esto ocurre, la reparación tiene un importe de entre 700 y 2000 euros y se requiere entre 8 y 20 horas de mano de obra.
Correa de distribución
La rotura de la correa de distribución es otro de elementos que supone un mayor gasto. No es tanto el precio de la propia correa, como los daños que causa al romperse. Reparar todos los elementos que puede dañar conlleva un gasto de entre 300 y 2.500 euros, más mano de obra de entre 8 y 20 horas.
Gripar el motor
Otra de las peores averías que puede sufrir un vehículo es que se gripe el motor. Esto ocurre por estar sometido a una altísima temperatura. El precio de la reparación no suele bajar de los 1.500 euros y puede llegar a alcanzar los 6.000.
Junta de la culata
Sustituir la junta de la culata es muy laborioso, conlleva entre 15 y 25 horas de trabajo y el coste de la pieza oscila entre los 400 y los 800 euros. Suele ocurrir debido a un sobrecalentamiento del motor. Para evitarlo es conveniente revisar periódicamente el refrigerante del vehículo.
Caja de cambios
Aunque es menos frecuente, la caja de cambios también puede romperse. Normalmente sucede por descuidar el mantenimiento del vehículo o por una mala práctica al cambiar de marchas. El coste de reparación o sustitución de los elementos dañados oscila entre los 1.000 y los 3.000 euros.
Reparar un coche tras un siniestro
Aunque todos los vehículos están obligados a contar, como mínimo, con un seguro de Responsabilidad Civil, éste sólo se hará responsable de los daños ocasionados a terceros, pero no de los que sufra el propio coche asegurado.
Si la situación se produce a la inversa y ha sido otra persona la causante del siniestro será su aseguradora la que tendrá que hacer frente a la reparación de los daños, independientemente del seguro que tenga contratado el otro vehículo implicado.
También el cambio de embrague puede considerarse una reparación costosa, si bien no tanto como las precedentes. Además, hay algunas variables que pueden reducir o aumentar el coste de esta reparación. Dependiendo de si el coche está equipado con un kit de embrague normal o con volante biomasa, el coste puede ser más elevado, y el taller o la provincia donde se efectúe la reparación también tiene un gran impacto.
Así, por ejemplo, si llevas a cabo esta reparación en alguno de los talleres mecánicos de cambio de embrague en Almoradí vas a ahorrar mucho dinero en relación a si lo haces en León, cuya media de precio por realizar esta operación supera los 1800 euros y se sitúa como la más cara a nivel nacional.