Es vital tener presente que la correa de distribución es una de las piezas más importantes porque se encarga de mover tu motor. Para conseguir los repuestos de la más alta calidad a un precio bajo te recomiendo visitar despiecesde, porque allí encontrarás todo lo que necesitas para las reparaciones de tu vehículo.

Pero, puede que no sepas cuándo debes cambiar la correa de distribución para evitar que esta se rompa y cause daños al motor. Por este motivo, hoy te he preparado este post, con la finalidad de que puedas hacer el cambio en los momentos más indicados y así tengas el rendimiento adecuado.

¿Cuándo cambiar la correa de distribución?

Es vital tener en cuenta que, para hacer el cambio de la correa de distribución debes fijarte en algunos indicadores que serán básicos. Estos son los siguientes:

Vida útil

La vida útil de la correa de distribución se mide en kilómetros de recorrido de tu vehículo, y esta es de 100.000 kilómetros. Todos los fabricantes recomiendan que cada vez que en tu coche se alcance este límite se haga el cambio de la correa de distribución.

En este punto la correa ya tiene un desgaste bastante profundo, y es mejor hacer el cambio antes de que se vaya a romper. De esta forma, podrás evitar accidentes en tu coche que incluso pueden dejarlo irreparable.

Pérdidas de tensión

Las pérdidas de tensión son otro aspecto importante que deberías tener en cuenta, porque son más comunes de lo que puedes imaginar. Si haces una reparación en el motor o si llevas tu coche a un taller no especializado podrías exponerte a estas pérdidas de tensión.

Esto ocurre cuando la correa se afloja un poco, y puede no parecer la gran cosa y dirás que simplemente se vuelve a su lugar. Pero, esta pieza no puede recuperar su tensión, por lo que debe cambiarse de inmediato.

Fugas en el motor

Puede que tengas fugas en el motor bien sea de aceite o de líquido refrigerante y es que son de lo más común. Esto debido a que las mangueras con el paso del tiempo se van desgastando por el calor dejando espacio a las fugas.

Debes reparar cualquier tipo de fuga de inmediato cuando sea detectada, para conseguir así el mejor rendimiento posible. Asegúrate de revisar la correa una vez reparada la fuga, porque si ha sido afectada por la misma, es probable que necesite un cambio cuanto antes.